SAN ANTÓN (NAVALVILLAR DE PELA)

HISTORIA DE UNA FIESTA DE INTERÉS TURÍSTICO
 
Podría ser un destino muy interesante en los fríos dias de Enero pero que en este pueblo abierto a todas las gentes te dará el calor necesario para pasar unos días inolvidables.

Navalvillar de Pela está en la encrucijada de dos comarcas la Serena y la Siberia en la Nacional 430, a partir de ahora empieza la tradición donde se mezclan Caballos, Dulces (Biñuelos) Vino autóctono, y fuego purificador, y por supuesto muchas ganas de fiesta. Desde el día 6 de Enero las calles se llenan de una emoción especial, los caballos comienzan a sentir la noche del 16, los niños todas las tardes al repique de campanas hacen el recorrido oficial con cencerros al cuello y recibiendo a cambio un dulce típico al finalizar el recorrido. Lo primero que se ve el 16 de Enero al llegar es una multitud de caballos alrededor de las calles con el vino por bandera, con el traje típico tanto de los caballos con sus madroños como de los jinetes, con la camisa blanca, la faja, el pañuelo al cuello y el gorro típico. Lo primero que hay que hacer es llegar al mediodía ver el ambiente, acercarse a ver la bendición de los animales en la iglesia cerca del parque por parte de San Antón, posteriormente ya comienza la emoción. Se puede vivir de dos maneras la noche, con un caballo o como infantería. Después de unas cervecitas en el parque a eso de las 7 y media hay que buscar un pañuelo rojo y una camisa blanca (Encamisá) y dirigirnos a la Plaza del pueblo, aquí se irá concentrando muchísima gente hasta que a las 8 comienza el pregón en la terraza del ayuntamiento, este pregón lo da a su manera el mayordomo de los festejos, dentro del ayuntamiento se da un refrigerio para todo aquel que quiera acercarse y entrar, la emoción inunda la plaza, el mayordomo termina su pregón con los VIVAS característicos, VIVA SAN ANTÓN, VIVA SAN FLUGENCIO, VIVA SAN ANTONINO, VIVA EL CHIQUIRRININO, Y EL QUE NO DIGA VIVA QUE SE LE SEQUE LA BARRIGA. Hay que contestar con un viva hasta quedarse sin voz cuando los jinetes te convoquen. Al terminar esto comienzan a repicar las campanas, y una salva de fuegos artificiales da comienzo a la carrera que irán por las calles más típicas y antiguas del pueblo dando vueltas con los caballos entre hogueras impresionantes, El frente de la carrera lo componen un caballo con un estandarte blanco y un caballo con un tambor estos darán tres vueltas y con esto dará fin a la carrera, a lo largo del recorrido hay distintos remolques con el vino típico que se ofrece gratis a todo el que quiera, y los biñuelos también gratuitos, también a lo largo del recorrido hay distintas cocheras donde la banda de música irá parando con toda la infantería a bailar, a tomar vino y dulces. Un lugar emblemático para parar es la Plaza de la iglesia antigua. Así al ritmo de VIVAS, estaremos hasta las 11 de la noche hora en que más o menos se irá disolviendo la carrera cuando el humo de las Hogueras de lugar a la fiesta en todo el Pueblo.
San Antón es el patrón de Navalvillar de Pela y en su honor se dedican la Fiesta de San Antón Abad, cuyo acto más relevante es La Encamisá. Del vínculo histórico entre San Antón y La Encamisá no se puede aseverar nada, no existen documentos, solo hipótesis. Según la Leyenda de la Encamisá, la victoria de los peleños contra los moros se culminó en la mañana del día 17( día de San Antón), cuando éstos abandonaron las cercanías del pueblo, es por ello que desde entonces los vivas al Santo es todo un ritual en la noche de la Carrera. A él se le dedicó la salvación de Navalvillar de Pela. En lo que no cabe duda alguna, es el vinculo sentimental existente entre San Antón y La Encamisá en la actualidad y siglos recientes, donde si existen documentos. Ya fuera en la república, en la guerra civil o en la dictadura, La Carrera de San Antón o Encamisá siempre se corrió, y nunca faltaron los vítores al Santo Patrón. Por otro lado San Antón Abad, representa fielmente el espíritu de La Encamisá: la pasión de un pueblo por su fiesta y su entrega para que todo el mundo pueda disfrutarla, donde la hospitalidad hacia los demás es todo un privilegio para cualquier peleño. Si al principio, a San Antón se le dedicó una victoria contra otros, hoy a San Antón, se le dedica la fiesta mas querida de un pueblo que quiere compartirla con todos.








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